“Los libros de Robin Sharma están ayudando al mundo a vivir una excelente vida”, dijo Paulo Coelho, el famoso novelista brasileño.
Robin Sharma (60 años) es una de las principales referencias sobre liderazgo y desarrollo personal en todo el mundo. A lo largo de su carrera, ha trabajado con los artistas, billonarios políticos y deportistas más influyentes. Su foco se centra en el crecimiento personal y desarrollar el máximo potencial de las personas. Después de mucho trabajo y profundidad en el tema, nos ofrece una serie de ‘bestsellers’ como “The 5AM Club” y “The Wealth Money Can’t Buy”.
Esta vez nos deja otro extraordinario libro que consideramos de lectura obligatoria para conocer que el éxito se basa en un único principio: resolver en qué somos buenos y qué nos gusta, para poder crear y ofrecer valor al resto.
Nos dice que, para poder encontrarle sentido a la vida, esta debe estar buscando constantemente a un propósito. Por naturaleza, todos somos diferentes y, en ese sentido, contamos con algo único que aportar a nuestra sociedad. Con esto, primero tenemos que volvernos en seres valiosos para después ser generosos con ese valor. Lo material, el dinero y lo demás aparece como consecuencia, no al revés. Mientras más temprano lo descubramos, mejor.
Ir en búsqueda de este camino depende 100% de nosotros. Todos somos capaces de hacer el ejercicio y lograr vivir con integridad.
¿Por qué este libro?
Consideramos a Robin Sharma como uno de los directores y principales referentes de la Cultura Flip. Valida una filosofía de vida interiorizada en nuestros principios.
Creemos que el desarrollo personal y profesional son dos caras de la misma moneda.
Del mismo modo, buscamos ser ese espacio donde la gente pueda empezar a descubrir sus talentos, un lugar que permita desarrollar el máximo potencial de las personas, para así, juntos, hacer cosas increíbles.
Como consecuencia, en Flip seguimos el propósito de ofrecer tranquilidad en las personas que buscan la libertad financiera. Por esto, vamos buscando constantemente dónde están nuestros talentos, para luego combinarlos con nuestra pasión por las inversiones y así ofrecer valor a nuestra sociedad.
Al final, descubrir nuestras capacidades, definir nuestro propósito y conocer el contexto en el que existimos nos permite actuar de manera auténtica e integral en cada uno de nuestros esfuerzos. Reconocemos que el hecho de ser diferentes nos hace únicos y con eso vamos en búsqueda de desarrollar algo trascendental.
Les compartimos nuestro resumen del libro con sus principales reflexiones.
¿Qué pasa cuando perdemos nuestro propósito?
Julian Mantle era uno de los abogados más exitosos de Estados Unidos. Contaba con ingresos millonarios, un avión privado, una casa de playa en una isla y todos los lujos posibles de conseguir. Sin embargo, llevaba una vida extremadamente desordenada.
Al estar consumido por la intensidad de su jornada laboral, le era imposible buscar pausas para reflexionar sobre el sentido de su vida. Estaba totalmente cegado por la ambición. Necesitaba más prestigio, más dinero y, al conseguirlo veía cómo nada de esto lo satisfacía realmente. Se encontraba persiguiendo una versión completamente ilusoria de éxito.
Como consecuencia, no solo descuidó a su familia, también perdió el rumbo físico, emocional y espiritual. Recordaba que, cuando era un estudiante, soñaba con un mundo más justo. Estudiar derecho lo llenaba de ilusión y veía en esta carrera la posibilidad de ayudar a su entorno. Años más tarde, esta chispa ya no existía. Se vio totalmente envuelto por la rutina y perdió el propósito que alguna vez lo llevó a querer ser un buen abogado. Se convirtió en alguien incapaz de generar valor para el resto. Lamentablemente, como menciona el autor, el placer se había vuelto negocio.
Todo esto, en suma, produjo que Julian colapse en pleno tribunal y sufra de un infarto. Este episodio lo obligó a frenar el ritmo frenético en el que vivía, llevándolo a poner pausa en su vida. En ese momento se dio cuenta de que necesitaba cambiar muchísimos hábitos, por lo que decidió viajar a la India en busca de una rutina mucho más sana. Tras varios meses de búsqueda, pudo conocer a un grupo de monjes conocido como los Grandes Sabios de Sivana. Ellos habían descubierto una manera de vivir que buscaba mejorar la calidad de vida de cualquier persona, en todo aspecto.
Esta filosofía de vida nos deja lecciones que todos deberíamos conocer y nos regala una nueva perspectiva de ver la realidad. Julian adquirió todo el conocimiento posible y prometió compartirlo al momento de regresar a la ciudad.
¿Qué nos dice la filosofía de los sabios?
Julian enfrentó un completo cambio de vida y regresó a la ciudad. Se le veía mucho más joven, más alegre y lúcido. Se dio cuenta de que todos nosotros contamos con un potencial infinito, que nos hace capaces de hacer cosas increíbles. Pudo descubrir realmente cuáles eran sus verdaderos talentos.
De esta manera, al comparar la actualidad con su vida pasada, contaba que el éxito externo es vació si es que primero no somos exitosos internamente.
Para lograr ser felices, los seres humanos necesitamos encontrarle un sentido a la vida. Todos somos diferentes y, en ese sentido, podemos aportarle algo único a la sociedad. Sin embargo, para poder ofrecer valor, tenemos que convertirnos primero en seres valiosos. Buscar y conocer en qué somos buenos para ayudar realmente a nuestro entorno. Si logramos establecer esta solidez interna, lo material y el dinero aparecen como consecuencia.
¿Todos podemos aprender de esta filosofía?
Como nos cuenta el autor, todos somos capaces de aplicar esta filosofía y empezar a potenciar nuestra vida. Para esto, el primer requisito consiste en confiar en que podemos aplicarla.
«El estudiante hace al maestro»
De esta forma, nos ayuda estar completamente dispuestos a adquirir nuevos conocimientos, dejar de creer que no hay nada nuevo por aprender.
Es muy importante sentir la emoción de que siempre podemos seguir aprendiendo. Aceptar con humildad la ignorancia que tenemos sobre nuevos temas y así nunca parar de buscar maneras de crecer. La creatividad también surge en el momento que ampliamos nuestra visión sobre el mundo. Del mismo modo, nos valida que adquirir la costumbre de percibir nuestros errores como la mejor forma de aprender.
«No hay errores en la vida, solo lecciones»
Esta filosofía de vida contiene una serie de principios fundamentales y prácticos que nos pueden llevar a vivir con balance e integridad. Una vez ahí, podemos llegar a conocer nuestro máximo potencial
«Los sueños de los grandes soñadores nunca llegan a cumplirse, siempre son superados»
Cuida cada uno de tus pensamientos
En primer lugar, podemos hacer una analogía entre nuestra propia mente y un jardín. Si logramos cuidarla y cultivarla de buenos pensamientos, empezamos a ver todo a través de un nuevo y mejor filtro. Sin embargo, como nos dice el libro, la inclusión de un solo pensamiento tóxico podría contaminar todo lo que lo rodea.
Esta idea se ve representada por las preocupaciones y ansiedades que solemos inventar sobre el pasado y el futuro. Muchas veces son imágenes lejanas a la realidad que solo nos producen sentimientos negativos.
Como nos cuenta el autor, el 99% de todos nuestros pensamientos son exactamente iguales a los del día anterior. Esto nos muestra cómo nosotros mismos nos limitamos a inventar ideas sobre un futuro mejor. El ser humano es la única especie con capacidad de inventar a través de la imaginación y actuar desde ahí. Esto nos ha permitido organizarnos y seguir evolucionando con el paso del tiempo.
¿Cuál es la forma?
Contamos con el poder de controlar nuestra mente y el contenido que le brindamos. Somos los únicos responsables en el intento de atraer pensamientos positivos sobre nosotros mismos y nuestro entorno. Todos estamos compuestos por la misma materia prima, por lo que la diferencia recae en quién utiliza mejor sus recursos.
Finalmente, quien controla su mente es capaz de controlar su vida. Siguiendo un principio estoico, no podemos influir en el resultado de los eventos externos, pero sí en nuestra manera de reaccionar ante ellos. Controlar nuestra mente nos da libertad de vivir como que realmente queremos.
Nosotros somos quienes establecemos nuestros propios límites, por lo que la riqueza de nuestros pensamientos son las que determinan nuestra calidad de vida.
¿Qué práctica me ayuda a controlar mis pensamientos?
Buscar el silencio para poder ser conscientes de lo que pensamos. En estos momentos de reflexión, vamos desarrollando el hábito de disfrutar y valorar el presente. Al vivir en un ritmo tan frenético, un espacio de pausa siempre nos va a ayudar a despejar las preocupaciones.
De esta forma, al momento de percibir un pensamiento negativo, podemos identificar de su presencia y empezar a cambiarlo.
Buscar nuestro propósito
Tras conocer la importancia de cultivar el jardín de nuestra mente, podemos empezar a pensar en cómo dirigir estos pensamientos. Como nos cuenta Sharma, para que la vida tenga realmente sentido, tenemos que vivir con propósito.
Ese punto en donde nos planteamos la pregunta
¿Qué queremos hacer?
Cuestionarnos nos lleva a conocer a lo que los sabios definen como nuestro “Dharma”, aquella creencia de que todos tenemos un propósito único en la tierra. Al ser diferentes, todos contamos con talentos y pasiones que son imposibles de imitar, cualidades exclusivamente nuestras. El secreto se centra en descubrir cuáles son.
De esta forma llegamos a la importancia del autoconocimiento. Las personas más exitosas del mundo lograron conocer sus talentos, sus pasiones y sus miedos para poder aceptarlos e ir resolviendo su vida.
Busca constantemente eso en lo que eres bueno y, una vez que lo encuentres, nunca lo sueltes. Es el punto de partida en nuestro camino a ofrecer lo mejor de nosotros al resto.
Establecer un propósito claro nos lleva a disfrutar del proceso, donde logramos conectar sentimiento con trabajo.
Nunca dejes de crecer
Una vez que conozcamos la importancia de cuidar nuestros pensamientos, para ir en búsqueda de nuestro propósito, siempre debemos estar acompañados de un concepto clave en nuestro camino: la autosuperación. Esta filosofía llamada Kaiezen nos cuenta que, para mejorar nuestra salud, nuestras relaciones y nuestras finanzas, debemos ir con mucha disciplina por el camino de la mejora constante.
¿Cómo lo logramos?
Autorrenovándonos siempre. “Crecer para sobrevivir no equivale a crecer para prosperar”.
Para este punto, es importante ser conscientes de que siempre hay espacio para crecer en conocimiento, en estado físico, en hábitos y en habilidades. Cuando salimos de nuestra zona de confort, nos empezamos a liberar. El cambio es el que empieza a formar nuestro carácter
Contar con la humildad suficiente para aceptar nuevos conocimientos nos permite crecer en autoestima y en sabiduría. Julián demostró que no hay mayor peligro que creer que no hay nada más por aprender. Esto lo limitaba completamente a conocer la realidad.
Al mismo tiempo, estar dispuestos a conocer nuestros miedos y debilidades nos da la oportunidad de poder enfrentarlos. Mientras más nos conozcamos y nos aceptemos, va a ser más fácil mejorar de manera correcta.
Empezar a superarse nos lleva a poder auto dominarnos. Como dice Epicteto, uno de los principales referentes de la filosofía estoica “Ningún hombre es libre si no es dueño de sí mismo”.
Como nos cuenta el libro, mejorar siempre debe estar acompañado del cómo. Por esto, nos recomienda buscar el silencio, enfrentar nuestros miedos y a partir de ahí, comenzar un nuevo camino hacia la libertad.
La felicidad se encuentra en el proceso, no en el resultado. Al final, si estamos invirtiendo nuestro tiempo en lo que realmente queremos hacer, cuidando nuestros principios, nunca perdemos.
¿Cómo lograr la felicidad?
Según Robin Sharma, se reduce en el esfuerzo constante de intentar realizar tus sueños. La búsqueda de tu propósito te lleva a poder establecer prioridades, a cuestionar qué quieres hacer realmente con tu vida.
Esto nos lleva a conocer las actividades que realmente nos hacen sentido. Increíblemente, al reconocer prioridades, nos volvemos capaces de reducir necesidades. Nos convertimos en personas autosuficientes, capaces de vivir a través de la simplicidad.
La felicidad, según Sharma, se encuentra en nuestra capacidad de vivir una vida integral
una vida balanceada que reúne salud física y mental, con nuevos aprendizajes y relaciones sanas, acompañadas de un contexto adecuado.
Todo esto, junto a una base sólida de principios y valores, nos permite ofrecer valor real a quienes nos rodean.
De esta manera, el libro nos cuenta que la felicidad significa resolver nuestra vida. Algo muy simple, pero al mismo tiempo muy complejo. Llegar a conocer en qué somos buenos para servirnos a nosotros mismos y también a los demás.
¿Qué nos valida el libro?
Desde Flip, estamos convencidos de que haciendo ese ejercicio de encontrar en qué somos buenos y regirte bajo una serie de principios alineados a él, va a permitir encontrar el éxito personal y la forma de generar valor a los demás.
Por eso, este libro nos valida que esa integridad a nuestro ser, que encontramos siguiendo esa filosofía, es la que nos va a permitir conectar con el mundo y llenarnos de energía para seguir (continuamente) con pasión, disciplina, emoción y humildad lo que sea que nos propongamos para ser los más competitivos en lo que hagamos.
Flip no es un trabajo o un fondo de inversiones; es una experiencia de vida, en donde puedes seguir tu vida, no la del resto, con gente que te quiere y tú quieres, para alcanzar la mejor versión de ti. Ese es uno de nuestros principios: ‘Trascendencia’.
La Trascendencia es un pilar de nuestra filosofía y cultura como empresa. Vamos en ese intento de dejar una forma de trabajar que pueda mantenerse en el tiempo, de dejar nuestra propia marca en este mundo.
Por eso Robin Sharma es otro de los referentes para nosotros, tanto en la vida personal como en el negocio. En la misma línea que Warren Buffet (mejor inversionista de la historia), Simon Sinek (escritor) y filósofos históricos como Nietzsche o Seneca nos acompañan diariamente en nuestra forma de actuar. Los que llamamos nuestros precursores.
Este libro lo puedes encontrar en librerías como Crisol o en plataformas digitales como Buscalibre o Amazon.
Seguiremos compartiendo resúmenes de los +500 libros de nuestra biblioteca en Flip a través de este canal. Para acceder a nuestro repositorio, puedes visitar la sección de “Resúmenes” en el blog de nuestra página web.
Un abrazo,
Nacho Aguirre y el equipo de Flip